martes, 20 de noviembre de 2018

Atrapada



Atrapada entre dos hemisferios: el derecho y el izquierdo, cualquiera creería que soy alguna neurona viajando en los canales de luz, pero no, soy una persona común y normal, más común que nada.

Estoy atrapada en mis pensamientos, en los recuerdos, en los deseos y los sueños, no me libero de los anhelos, ellos se aferran a mí, pero, ¿qué no saben que atrapándome jamás se podrán cumplir?

Día a día escucho mi voz retumbar de un lado a otro, viajando de estante en estante, hasta que llega a aquellos rincones en donde abundan los colores grises, olvidados, y entonces desaparece,

Quizás yo ya sea también  gris.

¿Para que soñar cuando es impalpable? ¿Para que emocionarse por algo inexistente? Quizá lo más inexistente que pueda haber en este momento sea yo.

domingo, 13 de mayo de 2018

¿Anonimó quién?

Hubo una persona que respondió uno de mis post, pero es tan bella la respuesta que aquí la quiero publicar, la persona que lo escribió responde al nombre de anónimo, y la pregunta que quiero hacerte es: ¿en realidad me conoces o solo te sumergiste en la trama de mi escrito?

Si quisieras seguir escuchándome, puedes leerme; se que aquel tipo, o aquel otro de allá n pronuncian las palabras que llegan a tu alma. Yo lo hago, lo sabes, lo sabemos.


Me gustaría acercarme a tu oído y repetirte lo que necesitas saber, podría contarte sobre la vida que no conoces, la vida que sólo llevamos tú y yo en mi mente. ¿Te conté acaso que quería huir contigo? Dejaría todo, si me dijeses “ven”.


Tomaría el carro, ropa, dinero y algunas provisiones, y te iría a buscar a la casa de tu madre, no sería difícil que lograras salir de ahí desapercibida, solo tendrías que saltar por el techo del primer piso, ahí estaría yo para recibirte en mis brazos, nos besaríamos y tomados de la mano te llevaría hasta tu asiento de copiloto, de copiloto de mi vida.


Manejaría hasta la gasolinera saliendo de la ciudad, te animaría a decir adiós a todo lo que dejamos atrás mientras las luces se van atenuando por la distancia, adiós a mi vida, todo lo que tengo, adiós a tu vida, todo lo que pensaste tener.


Avanzaría hasta que el sueño llegara a nosotros y pararía en un páramo junto a un río, dormiríamos por primera vez juntos, mientras el cielo nos ofrece un espectáculo entre estrellas, me mirarías, te miraría, sonreirías entonces con esa sonrisa que vi tan pocas veces, me sentiría en paz.


Tomaría tu mano mientras nos adentramos en las colinas.


Es real en mi mente, lo recuerdo, como si hubiese sido, te recuerdo a ti junto en mi pecho, tu sonrisa, la noche iluminada por las estrellas, el río, los árboles y su melancolía,  y el viento que decía tu nombre…


Te podría decir más , tomarte nuevamente, decir toda una vida, toda una vida que no conoces, una vida dentro de mi vida.
Anónimo